Segun esta nota publicada en la red, funcionarios del gobierno del estado presionan o negocian con General Motors para que los salarios ofrecidos a los trabajadores de la planta automotriz sean acordes a los ofrecidos por otras empresas en la zona industrial; es decir que no sean muy altos. Esta medida contraviene el más elemental sentido de justicia social que debería tener un gobierno puesto que presiona para que los salarios no se incrementen, siendo que la productividad lo permite. Además, promueve la ineficiencia en la asignación de trabajadores, ya que los trabajadores más capacitados deben emplearse en las empresas donde se requieren mayores conocimientes; este principio elemental sirve tanto para las economías de mercado como para las economías planificadas.
En el caso de una economía de mercado, como la que supuestamente defienden nuestros emrpesarios y gobernantes, la asignación de los mejores trabajadores en las empresas donde son más productivos se realiza mediante los precios del trabajo. Es decir, para que GM atraiga los mejores trabajadores, como su planta productiva lo requiere, evidentemente debe pagar salarios superiores a los de otras empresas, solo existen daños all bienestar social al impedírselo . Alguien debería emplazar al gobierno del estado para que explique cuáles son las razones para promover esta política estúpida, que solo protege el miedo irracional a los trabajadores que tienen algunos empresarios potosinos.
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