viernes, 4 de abril de 2008

Hacia el debate. Carta I: ¿Qué es la privatización?



A la convocatoria de la secretaria de Energía y del director de Pemex para un debate amplio sobre la reforma energética, respondimos afirmativamente en nuestro carácter de ser uno más de los numerosos grupos y personas interesados en uno de los asuntos fundamentales del desarrollo nacional. A la invitación primera no han seguido propuestas del gobierno federal sobre las formas y los métodos del debate y, en abierta contradicción con la propuesta, el Partido Acción Nacional da por inexistente el llamado a discutir y anuncia que serán ellos y no el Poder Ejecutivo, quien envíe el proyecto a las Cámaras. También, y en sentido complementario, el senador Manlio Fabio Beltrones decide que no hace falta el debate y que ya todo debe estar en manos de expertos. Eso es, de modo tajante, el llamado a la privatización del conocimiento, sin más. Los expertos tienen necesariamente, la última palabra, pero en una democracia, esa última palabra se integra por las decisiones informadas de la colectividad.
Suponíamos y suponemos que el Ejecutivo tiene por razón natural una información abundante sobre el petróleo, muy superior a la de Acción Nacional, pero cada grupo decide cómo distribuye sus costos políticos. Y, también, es curioso que el PRI, por voz de su líder, decida que a los ciudadanos, en su calidad de no expertos, les toca callar y obedecer.
Confiamos en las virtudes críticas del debate y por eso insistimos en mantenerlo como salida racional. Por eso ahora presentamos una definición posible de la privatización del petróleo. Estamos seguros que por su carácter crucial, la discusión continuará. ¿Cuál es la prisa?
Privatización significa vulnerar el principio constitucional que hace de la Nación la propietaria de los recursos del subsuelo, en especial de los hidrocarburos, y reducir la exclusividad de Pemex en la explotación de los recursos petroleros de la Nación. Privatizar es entregar parte de esa riqueza a empresas nacionales y extranjeras, afectando la soberanía nacional y el presente y el futuro de los mexicanos.


Atentamente


Carlos Monsiváis
Sergio Pitol
Elena Poniatowska
Fernando del Paso
Margo Glantz
Hugo Gutiérrez Vega
Enrique González Pedrero
Laura Esquivel
José María Pérez Gay
Guadalupe Loaeza
Lorenzo Meyer
Arnaldo Córdova
Rolando Cordera
Ida Rodríguez Prampolini
Luis Javier Garrido
Víctor Flores Olea
Héctor Vasconcelos
Carlos Payán
Héctor Díaz Polanco
David Ibarra
Enrique Semo
Carlos Pellicer
Jorge Eduardo Navarrete
Luis Linares
Antonio Gershenson

1 comentario:

Jaime Lara dijo...

MI POSICION ACERCA DE LA PRIVATIZACION

Creo que hay un debate en el ambiente acerca de lo que implica la privatización. Según el gobierno y en general quienes apoyan la supuesta reforma, no hay privatización si no se venden algunos de los activos actuales de Pemex. Sin embargo, quienes sostenemos que la reforma es privatizadora entendemos la privatización puede, además de la venta de los activos de Pemex, tomar alguna de las siguientes modalidades:
1) La posibilidad de que el sector privado pueda realizar inversiones en alguna actividad actualmente reservada a Pemex.
2) La posibilidad de que Pemex realice contratos de servicios con empresas que pueden ser sus proveedoras, prestadoras de servicios o alguna otra modalidad de contratación.
En ese sentido es que se dice que ha existido una privatización silenciosa, en la medida que las actividades propias de Pemex se han venido contratando con empresas privadas (recuérdense los contratos de Mouriño)y que actividades que antes estaban restringidas a Pemex (como la refinación de algunos productos) ahora se pueden realizar por empresas privadas. Notese que ninguna de estas posiblidades implica venta de activos de Pemex, sino una ampliación de la participación privada en la actividad petrolera.
Si bien es cierto que sería imposible que Pemex realice todas sus actividades sin contratar insumos de otras empresas (no estaríamos pidiendo que Pemex produzca el papel que utiliza),también lo es que la actividad privada no necesariamente soluciona los problemas de la forma más eficiente socialmente. Así que lo indispensable es abrir la informaciónd de la empresa para conocer las opciones de mejora que pueden venir desde una mayor eficiencia de la empresa en sus actividades actuales hasta una ampliación de las actividades de Pemex donde actualmente participa el sector privado.

Un saludo.