¿Por qué vender Santa Rita?

El gobierno es un mal empresario. Uno de los dogmas neoliberales que muchas ocasiones resulta cierto, sobre todo cuando dejamos a un neoliberal al frente de una empresa pública. Ultimamente, sin embargo, hasta los empresarios han resultado malos empresarios. Tomemos la actual crisis financiera y el hecho de que en ya casi 30 años nuestros grandes empresarios (Slim, Roberto Hernández, Emilio Azcarraga, Salinas Pliego, entre otros) no han podido hacer crecer a México.

Ahora bien, el caso del invernadero de Santa Rita enseña varias cosas sobre la participación de el gobierno del estado en las empresas públicas.

1. Que las instituciones locales no estaban diseñadas para vigilar y operar una empresa con participación publica. ¿Habrá alguien que se ponga a pensar en alguna reforma: Ley de Transparencia, facultades de la Auditoria? Según el titular de la SEDARH ningun diputado ha solicitado mayor información respecto los invernaderos ahora que se ha propuesto su venta, quizá todos andan haciendo precampañas.

2. Que seguramente hubo más de un corrupto en ese proyecto. Lo que no queda claro es cuántos y si todos fueron priistas.

3. Que la idea no era mala. Porque se trataba de un proyecto que no solo era rentable, sino que serviría para acercar a los productores potosinos a las tecnologías más avanzadas. Incluso, en la página del gobierno del estado se menciona dicho aspecto. ¿Qué se ha hecho desde la Secretaría de Agricultura para que los invernaderos coadyuven en la adopción de tecnologías avanzadas en el campo potosino: hay alguna forma de que dicha tecnología pueda adaptarse a otras zonas con potencial para la instalación de invernaderos? Me pregunto si es posible que pueda resolver algunos problemas en Villa de Arista. ¿Cuántos estudiantes de la Facultad de Agronomía realizan prácticas y talleres en Santa Rita?

4. Que vender por vender cualquier negocio no lo hace ningun empresario, excepto cuando entra de político y administra las empresas que no son suyas.